viernes, 16 de octubre de 2009

Todo sale a la luz

Y es que podemos ser tan estúpidos, tan vanos y ridículos, que nuestro egoísmo mostramos sin discreción, de buena gana hacemos gala de nuestra soberana estulticia, porfiadamente nuestra soberbia exponemos sin velos... por mucho que tratemos, ni la hipocresía logramos esconder bajo antifaces: más temprano que tarde, todo sale a la luz.